La Tecla Mar del Plata
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La situación ganó todos los titulares nacionales el 20 de diciembre cuando la esposa de un oficial de marina oriundo de Mar del Plata le gritó el apellido de un militar asesinado por la guerrilla a la por entonces flamante presidente Cristina Fernández.
“¡Larraburre!”, fue la consigna que lanzó Mónica Liberatori durante el evento en el Colegio Militar, en el primer acto de Cristina ante las Fuerzas Armadas en una ceremonia de egreso conjunto de los cadetes de las tres fuerzas. A consecuencia de ello, su esposo y oficial de la Armado, Marcelo Toulemonde, fue pasado a retiro obligatorio en 2012 tras un procedimiento interno donde se lo responsabilizó porque “no supo controlar debidamente a su señora esposa respecto de las normas de comportamiento a seguir”.
Ahora, en un fallo de 28 página dado publicado el 31 de octubre, la jueza federal subrogante del juzgado en lo Contencioso Administrativo II, Cecilia Gilardi De Negre, resolvió que la Armada debe indemnizar con $200.000 a Toulemonde por “daño moral. Sin embargo, rechazó su pedido de ser reincorporado al servicio activo.+
El mayor Argentino del Valle Larrabure fue un ingeniero químico secuestrado por el Ejército Revolucionario del Pueblo, el brazo armado del PRT, en 1974. Poco más de un año después su cuerpo sin vida apareció en Rosario.
En septiembre del año pasado, Liberatori volvió a estar en el centro de la polémica, a raíz de tweets donde se refirió a la situación de Corina De Bonis, una docente que denunció haber sido secuestrada y torturada tras las movilizaciones a raíz de la explosión de una escuela que causó la muerte de la vicedirectora Sandra Calamano y el auxiliar Rubén Rodríguez.
“Escríbanle la panza a Baradel que allí tiene lugar como para escribir la biblia troska” y “fue un crimen de lesa barriga”, publicó la profesora de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Mar del Plata en referencia a De Bonis, quien apareció con la inscripción “ollas no” marcada en su barriga.
La situación generó el repudio de amplios sectores, como del propio rector Alfredo Lazzeretti y de la Asociación Docente Universitaria Marplatense (ADUM), que solicitó se evalúe la posibilidad de iniciar un juicio académico.