La posibilidad de volver a las sesiones del Concejo Deliberante y sus comisiones se hizo realidad en junio, cuando se arribó a un acuerdo para implementar un protocolo para los encuentros presenciales y las sesiones semipresenciales, reforma mediante del Reglamento Interno del HCD. Los primeros en apuntarse por encontrarse dentro de la población de riesgo fueron el vicepresidente del órgano, Daniel Rodríguez y Liliana Gonzalorena, mayores de 60 años, y Roberto Gandolfi, Mauricio Loria y Marina Santoro, por cuestiones médicas. Sin embargo, desde esta semana Nicolás Lauría -el debut fue ayer en la comisión de Legislación- comenzó a participar desde la comodidad de su casa, en un caso que llamó la atención por tratarse no solo del concejal más joven, con 32 años, sino que además se trata de un deportista profesional en actividad, dos características que lo ubican lejos de quienes podrían estar más expuestos a las consecuencias del virus en caso de contraerlo. El argumento presentado por quien encabezó la lista de concejales de Juntos por el Cambio es que como su pareja cursa un embarazo, eventualmente sería ella la que correría con riesgo en caso de contagiarse, por lo que decidió guardar aislamiento y no asistir al Concejo Deliberante. La postura no cayó bien en el resto de los concejales oficialistas, la mayoría de los cuales siguen asistiendo al Palacio Municipal pese a exponer a familiares suyos. Muchos también recuerdan la postura tomada semanas atrás por el intendente Montenegro, quien transitoriamente no asiste a su hogar tras ser padre hace dos meses. La situación además se dio en un marco particular donde el kirchnerismo había adoptado la posición de no asistir a comisiones en reclamo por la implementación de las reuniones 100% virtuales, donde Lauría apoyó la postura del principal espacio opositor. |