Los miembros de la Coordinación general de los CBE (Comités Barriales de Emergencia) se reunieron con el obispo Gabriel Mestre en donde se repasó los ejes del trabajo realizado en el marco de la pandemia del coronavirus. En este sentido, el referente eclesiástico asistió en carácter de “escuchador” de los planteos de los CBE. La Iglesia Católica, por medio de sus párrocos, capillas, comunidades de base y fieles laicos forma parte intrínseca del despliegue territorial de los CBE desde su conformación. En la reunión también dijo presente el obispo Raúl Escudé, párroco de Batán, Hernán David, párroco de Santa Rita y el laico Pablo Baldini, miembro de Cáritas diocesana y delegado laico en la Mesa Social. En concreto, representantes de la coordinación de los CBE agradecieron “el trabajo y recursos puestos en juego en favor de los sectores más humildes por parte de la Iglesia”. Además, compartieron algunas preocupaciones, en las que sobresalen una serie de reclamos hacia el Municipio, como un Estado “de mayor cercanía, elementos de higiene para los centros comunitarios, y una infraestructura de logística con refrigeración para asegurar las condiciones del alimento que se distribuye semanalmente”. Por su parte, Mestre nos señaló tres puntos centrales. En primer lugar, “prestar atención al cuidado” como valor para quienes realizan tareas de responsabilidad social y política para con otros. En segundo lugar, convocó a los CBE a ser parte del “Pacto Educativo Global” que plantea el Papa Francisco, y señaló la educación como “tarea principal para el desarrollo de una sociedad más justa, digna e igualitaria”. Finalmente, el titular de la Diócesis de Mar del Plata subrayó la necesidad de “seguir fortaleciendo la organización” como eje vertebrador de la propuesta que los CBE constituyen en los sectores más vulnerables. “Ustedes son los que proponen dónde está lo mejor y lo posible para atravesar esta coyuntura”, concluyó Mestre. |