Tras la elevación del Presupuesto 2020, uno de los puntos salientes, y quizás más controvertidos, es la creación de una sobretasa para financiar el pago de las bonificaciones docentes. En el expediente presentado ante el Concejo, el impuesto figura bajo el nombre “Contribución a la Salud Pública, Educación y el Desarrollo Infantil”. Con el mismo, el gobierno busca recaudar $625 millones en 2020 y, de ese modo, financiar el derecho que fue quitado en noviembre de 2018 por el ex intendente Carlos Arroyo y que volverá a ser abonado a partir del próximo mes por Guillermo Montenegro. Se trata de un nuevo impacto para el bolsillo del contribuyente, dado que el impuesto previamente era sólo para financiar la salud y el desarrollo infantil; pero ahora se suma la educación municipal. En números, esta tasa tendrá un incremento del 150%: en 2019, se proyectó recaudar $250 millones, mientras que, en 2020, $625 millones. En tanto, con esta sobretasa no se financiaría la retroactividad en el pago de las bonificaciones. Al menos así se planteó en la conferencia de prensa del jueves pasado, cuando se anunció la presentación del Presupuesto 2020. Al respecto, el titular de Economía y Hacienda, Germán Blanco aclaró que en la norma lo que se incluye es para “asegurar el financiamiento que le permita al municipio reintegrar la bonificación a partir de enero de 2020”. Por su parte, el secretario de Gobierno, Santiago Bonifatti, remarcó: “Lo que el intendente puede hacer es cumplir su palabra de restituir la bonificación y trabajar durante el año sobre el retroactivo y en la cantidad de procesos judiciales que ha enfrentado al municipio”.
|