30 de mayo de 2025
DIFERENCIAS
Garciarena reivindicó la universidad pública, una bandera incómoda para el oficialismo libertario
El diputado radical bonaerense fue designado Profesor Invitado en la UNLP y compartió un mensaje que refuerza una bandera histórica del radicalismo. Su posicionamiento contrasta con el actual rumbo del Gobierno Nacional respecto al sistema universitario.

El diputado provincial de la Unión Cívica Radical (UCR) Diego Garciarena compartió en redes sociales su designación como Profesor Invitado de la cátedra de Derecho Parlamentario en la Universidad Nacional de La Plata. Pero más allá del anuncio académico, el mensaje tuvo una fuerte carga simbólica en un momento donde el futuro de la universidad pública está en discusión.
“Una cátedra universitaria en la Universidad pública y gratuita es un espacio de generación de conocimientos y de construcción de ciudadanía. Me llena de orgullo y también de una gran responsabilidad”, expresó Garciarena, en un guiño a los valores fundacionales del radicalismo, profundamente ligados a la educación pública, la movilidad social ascendente y la construcción institucional.
El gesto no pasa desapercibido en un contexto político donde el Gobierno Nacional plantea un rumbo que pone en tensión el sostenimiento de la universidad pública, tanto desde lo presupuestario como desde la narrativa. Si bien Garciarena no apunta directamente contra esas políticas, su posicionamiento implica una toma de distancia.
La interna dentro del radicalismo también da marco a este tipo de expresiones. Mientras algunos sectores del partido se muestran más proclives a una alianza ampliada con el PRO y La Libertad Avanza (LLA), otros marcan diferencias, buscando preservar la identidad histórica del centenario partido. En ese sentido, el respaldo simbólico a la universidad pública aparece como una forma de reafirmar esos valores frente a las nuevas corrientes que buscan redefinir el rol del Estado.
Garciarena, con un tono moderado pero elocuente, se posiciona dentro del mapa político actual sin confrontaciones directas, pero con señales claras. Una intervención que trasciende lo personal y se inscribe en el debate de fondo sobre el país que se quiere construir.