La Tecla Mar del Plata
Todos los derechos reservados
Con el calendario electoral corriendo hacia el cierre de listas del próximo 19 de julio, el tablero político en Mar del Plata se mueve con más incertidumbre que certezas. Buena parte de esa tensión se explica por un proyecto que sigue empantanado en la Legislatura bonaerense, pero que genera un particular interés en General Pueyrredon: la iniciativa que podría habilitar nuevas reelecciones para legisladores provinciales, concejales y consejeros escolares.
Aunque aún no hay fecha para el tratamiento en el recinto, la propuesta —impulsada por el senador cristinista Luis Vivona— ya cuenta con dictamen favorable en la Comisión de Legislación General. El Senado le dio media sanción días atrás con un desempate clave de la vicegobernadora Verónica Magario, tras un 22 a 22. Desde entonces, comenzó el habitual “poroteo” para conocer si hay chances reales de convertirla en ley en la Cámara de Diputados.
Los números, por ahora, no cierran. El bloque oficialista Unión por la Patria cuenta con 26 votos propios, y necesita al menos 21 adhesiones más para llegar a la mayoría simple. Sin embargo, la reciente negativa del bloque Unión, Renovación y Fe —frecuente aliado del oficialismo— puso en duda la viabilidad del proyecto.
Desde Mar del Plata, la discusión es seguida con lupa. No solo por el impacto institucional, sino porque podría definir el futuro político de varios referentes locales. Entre los nombres que quedarían habilitados a competir nuevamente si se modifica la ley, aparecen Mercedes Morro (Juntos), Angélica González (Coalición Cívica), Virginia Sívori (Unión por la Patria), Guillermo Volponi (Vamos Juntos) y Ariel “Cholo” Ciano (Frente Renovador).
Concejalas y concejales que, de mantenerse la legislación actual, se verían obligados a dar un paso al costado el año próximo. Por eso, en los pasillos del Concejo Deliberante se activaron las calculadoras y las reuniones discretas para medir fuerzas y proyectar escenarios.
Más allá de los nombres, la reforma —que modificaría el artículo 3° de la Ley Orgánica de las Municipalidades— también podría alterar el diseño de las listas locales. Con más figuras habilitadas para competir, los armados electorales sumarían volumen, tensiones internas y una oferta más amplia en las boletas de 2025.
Por ahora, la suerte del proyecto sigue atada a los vaivenes de la rosca provincial. Pero en Mar del Plata, varios ya hacen cuentas, analizan alianzas y miran de reojo lo que ocurra en La Plata. Porque, aunque el tiempo apremia, nadie quiere quedarse afuera de la próxima jugada.