Los famosos llegan a los corazones de los fanáticos, lo cual es una situación común y corriente. El límite radica cuando los seguidores rompen las reglas convirtiendo la pasión en una obsesión.
Ya son varios los artistas argentinos que han alzado las voces contra el acoso exigiendo medidas judiciales más eficaces.
En el 2021, Benjamín Rojas vivió un momento dramático. Sucede que su esposa es dueña de un café y una fanática ingresó en el local, provocó destrozos, y lanzó objetos porque no encontró al actor para poder entregarle una carta. Vale mencionar que meses antes lo había buscado a la salida del teatro en plena temporada de verano, y lo amenazó en la vía pública.
Durante el mismo año, Nai Awada también enfrentó a un hombre a la salida de la peluquería. Sucede que el sujeto le escribía desde muchas cuentas en redes sociales, le enviaba cartas expresándole su amor hasta que un día decidió dar un paso mayor y se presentó en el salón de belleza. Tras la denuncia, la situación no pasó a mayores.
La modelo Jujuy Jiménez denunció dos veces a un acosador que, durante un viaje familiar, se hizo presente en un hotel y un restaurante. La siguió a sol y a sombra en toda la estadía. Es por ello que la periodista fue a una comisaría e inició una causa legal para poder protegerse.
De forma reciente, Cris Morena dio a conocer que, desde hace años, sufre el hostigamiento de un admirador que la enfrentó en un shopping en su domicilio. Luego de una denuncia, y una llamada de atención por parte de las autoridades, el criminal violó una perimetral y se hizo presente en el domicilio de la productora. En ese momento, se ordenó el allanamiento de la casa donde se encontró material como fotos, recortes, entre otros.
La historia de Celeste Cid empezó cuando tenía 15 años y un fanático comenzó a enviarle regalos como cajas con fotos, preservativos y cartas. También amenazó a sus familiares y amigos. Allí fue cuando la actriz denunció y pidió medidas para poder vivir en paz. El criminal fue diagnosticado e inició un tratamiento médico. La vida pareció ordenarse hasta que la diva que supo protagonizar Resistiré publicó un libro en una feria de Uruguay. Ahí pudo percatarse de la situación, avisó a las autoridades que detuvieron a esta persona.