12 de diciembre de 2025
DISPUTAS
El Concejo Deliberante en tensión por el reparto de poder en las comisiones
La distribución de las 13 áreas de trabajo legislativo genera el primer cortocircuito entre los aliados oficialistas, el PRO y La Libertad Avanza, que aspiran a presidir la estratégica comisión de Hacienda. Los nombres de Demaio y Cardoso marcan el pulso de las negociaciones que definirán la agenda local.
Con la jura de los nuevos ediles y el inicio de un nuevo período político, el Concejo Deliberante de General Pueyrredon se sumerge en la crucial tarea de definir las autoridades de sus 13 comisiones permanentes. Este reordenamiento no es menor, ya que la presidencia de cada una de ellas es la llave para controlar la agenda legislativa local en temas tan sensibles como el presupuesto, las obras públicas y la legislación general. En este camino de definiciones, ya se percibe un clima de alta tensión y disputa, especialmente entre las dos fuerzas que lideran al nuevo oficialismo: el PRO y La Libertad Avanza (LLA).
El epicentro de este primer gran choque de intereses se encuentra en la Comisión de Hacienda, Presupuesto y Cuentas. Esta comisión es vital, con incumbencia directa en el dictamen sobre el Presupuesto General, el Cálculo de Recursos, impuestos, rendiciones de cuentas y autorización de gastos, siendo el nervio económico de la actividad municipal. Los trascendidos señalan que LLA, que cuenta con cuatro bancas, ha puesto todas sus fichas en que su concejal, Rolando Demaio, un Licenciado en Economía con experiencia como asesor en el cuerpo, asuma su presidencia. La ambición de los libertarios es clara: comandar el área económica para imprimir su sello en la gestión. Cabe resaltar que el espacio libertario dirigía la comisión en el último período legislativo por medio de Cecilia Martínez.
Sin embargo, el PRO, con cinco concejales, también aspira a comandar este espacio de poder. La disputa por Hacienda marca, de hecho, el primer cortocircuito de relevancia entre los aliados. La definición no solo será un termómetro de las futuras relaciones entre estas fuerzas, sino que también determinará quién tendrá la mayor capacidad de influencia sobre las decisiones financieras de la comuna.
Más allá de la puja por Hacienda, el PRO ambiciona otras áreas de peso. Según trascendidos, la bancada amarilla se quedaría con la presidencia de la Comisión de Legislación, Interpretación, Reglamento, fundamental para el análisis e interpretación de normativas, ordenanzas y la Ley Orgánica de las Municipalidades. A su vez, el PRO tendría encaminada la presidencia de la Comisión de Obras y Planeamiento. Esta última, que dictamina sobre la ejecución de obras públicas y privadas, alumbrado, conservación de calles y planeamiento urbano y rural, estaría destinada a Marcelo Cardoso. Recientemente asumido concejal, Cardoso trae consigo el antecedente de haber sido titular de la Subsecretaría de Inspección General, un pasado en la gestión que lo posicionaría como un hombre clave para encarar los temas de infraestructura y desarrollo urbano.
Mientras tanto, las restantes comisiones —Ambiente, Deportes, Derechos Humanos, Educación, Industria, Movilidad Urbana, Políticas De Género, Salud Comunitaria, Seguridad Pública y Turismo— también entrarán en la negociación. La composición y el reparto final de estas áreas definirán la hoja de ruta de la actividad legislativa en el distrito. La resolución de este ajedrez político no es solo una cuestión de cargos, sino que sienta las bases para la dirección y el control de la agenda pública de General Pueyrredon en los próximos años, con la disputa por el timón de Hacienda como el punto más caliente, hasta ahora, de la transición.