La Tecla Mar del Plata
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Lo que prometía ser una gran noticia para Mar del Plata ocasionó más tensiones que otra cosa. La licitación del Parque de los Deportes Teodoro Bronzini, anunciada por el intendente Guillermo Montenegro el pasado 22 de agosto de 2024, suscitó expectativas. Sin embargo, desde el tratamiento del pliego hasta la apertura de sobres, la falta de claridad domina el proceso y multiplica las dudas.
Respecto al pliego, son varios los aspectos clave a analizar. Por un lado, la falta de un plan mínimo obligatorio de obras. Aunque se exige una “Propuesta de Obras”, no se establece un piso mínimo de inversión ni intervenciones obligatorias, lo cual puede permitir que un concesionario proponga una inversión mínima o se concentre en actividades más rentables, como shows o concesiones gastronómicas, sin reparar, por ejemplo, el techo del Minella.
Por otro lado, el pliego no exige experiencia previa específica en gestión deportiva. Se aceptan antecedentes empresariales “de impacto turístico y recreativo”, sin que sea obligatorio tener experiencia en la gestión de espacios deportivos. A su vez, se contempla una concesión de 30 años, con la posibilidad de extenderla a 10 más. En total, comprometería a diez gestiones municipales.
“Son formas de gestionar”
Desde la oposición aseguran que es “una licitación rara” y argumentan que no hay información disponible y de fácil acceso respecto a la única oferta que se realizó. En esta línea, detallaron que no hay forma de conocer el contenido de los sobres. En cuanto a la empresa, el grupo brasileño Reve, sólo se sabe lo que se puede averiguar por internet y se constituyó a los efectos de presentarse a esta licitación. No tiene ningún tipo de movimiento anterior. Además, no se puede ver el expediente porque no está digitalizado.
Como informó el medio Noticias y Protagonistas, la escasa información disponible sobre el grupo Reeve resulta alarmante, especialmente en lo que respecta a la auditoría realizada por la firma internacional Price Waterhouse Coopers. En este sentido, la situación financiera del grupo es preocupante y requiere un análisis detallado, que debería incluir una consulta al auditor responsable y solicitar aclaraciones adicionales a quien presentó la propuesta.
Asimismo, el concejal Horacio Taccone presentó proyectos para que se envíe al Concejo Deliberante “copia certificada de toda la información obrante en el o los expedientes”, además de requerir que el Departamento Ejecutivo “se abstenga de avanzar en el proceso licitatorio y de adjudicación”.
En este contexto, la licitación contrasta con la frustrada propuesta de convertir al Minella en la Casa de las Selecciones, un proyecto con respaldo de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y financiamiento nacional, que nunca se concretó ni fue oficialmente descartada. Mientras tanto, el futuro del principal símbolo deportivo de Mar del Plata se define sin claridad, sin competencia y sin que la ciudadanía tenga acceso a la jugada completa.