El Houssay en la mira: mientras crecen los señalamientos, Montenegro sugirió responsabilidades

La preocupación que luego se fue transformando en bronca en el gobierno municipal no fue disimulada esta mañana por el intendente Guillermo Montenegro luego del acto por el Día de la Independencia. “Si cumplimos los protocolos la gente no se contagia”, declaró en una intervención que alimenta las versiones sobre las falencias que se habrían cometido en el hospital Houssay y que permitieron que se registraran una catarata de contagios.

“Era de esperar, hicieron todo mal. En el Houssay improvisaron todo”, precisó ya sin filtros a La Tecla Mar del Plata un reconocido médico vinculado al sistema sanitario local. Las alertas se multiplican además por la naturaleza del nosocomio, donde se atienden a afiliados de PAMI, precisamente el sector más vulnerable al virus. “Chocaron la calesita”, describió, poniendo sobre la balanza además las ventajas del Houssay por sobre otros espacios médicos públicos de la ciudad en cuanto al manejo de recursos.

El principal apuntado es el director José Horni, quien renunció el 20 de junio pero sigue a cargo ante la indefinición sobre su reemplazo. El desgaste con los profesionales médicos y los auxiliares sería el factor que lo llevó a querer concluir su ciclo al frente del hospital. “Nunca tuvo capacidad de conducción y rompió todos los lazos con el personal”, señalan quienes conocen la situación de Horni, oriundo de Tapalqué, donde estuvo a cargo del CAPS San Cayetano y quien habría llegado al nuevo cargo a partir de sus estrechos vínculos con la titular de ANSES, Fernanda Raverta.

Las miradas también apuntan hacia las dos directoras asociadas que fueron ubicadas para acompañar a Horni. Sobre Silvina Fábrega se reconoce su importante conocimiento en la atención primaria de la salud, aunque su nula experiencia en hospitales, mientras que Mónica Sánchez llegó provenientes del Hospital Interzonal. “Se priorizó lo político por sobre lo profesional”, explican las fuentes consultadas.

Una de las situaciones especialmente observadas son los criterios que se tuvieron para la visita de familiares a los pacientes internados. De los once casos ayer confirmados, tres corresponden a familiares que se contagiaron en el hospital de Av. Juan B.Justo. Mientras que en la mayoría de los centros médicos se prohibieron las visitas o se limitaron al extremo, llamó la atención el criterio flexible que se implementó en el Houssay, donde además no se realizaban controles de síntomas.

Prácticamente nadie descarta que en las próximas horas se confirmen más casos. “Ahora estamos viendo lo que pasó hace 15 días”, coinciden los expertos. Asimismo, se alerta sobre los efectos secundarios que se presentarían de mantener la suspensión de la atención, tal y como se decidió el pasado lunes. Los jubilados de la ciudad seguirán presentando las complicaciones naturales para su edad y requerirán la correspondiente atención médica.

Por estas horas se aguarda la llega de un grupo de infectólogos enviados por PAMI desde Buenos Aires, quienes realizarán un diagnósticos sobre los errores cometidos y los cambios inmediatos a implementar. Suena el nombre de Alberto Lazo como cabeza del grupo, en lo que podría comprenderse como una virtual intervención sobre las funciones de Horni. Uno de los aspectos que se deberán profundizar, en tanto, es el estudio del nexo epidemiológico, donde se maneja el posible vínculo con el geriátrico Namasté, donde ayer se confirmaron tres nuevos casos. En principio, un enfermero cumpliría funciones en ambas instituciones.