Vivienda e infraestructura urbana, la situación en el Presupuesto 2021

La problemática del hábitat se evidenció con mayor crudeza en el país y la región en el marco de la pandemia por coronavirus. El cumplimiento de las medidas preventivas impulsadas por las autoridades emergió como una quimera a lo largo y ancho de innumerables barriadas populares, donde las condiciones de infraestructura para garantizar el distanciamiento y la salubridad están muy lejanas de lo necesario. Los conflictos por la toma de tierras fueron un signo que en lo político no pasó desapercibido, como así tampoco la reciente eyección del gabinete nacional de la exministra de Desarrollo Territorial y Hábitat, María Eugenia Bielsa.

El tema no pasa desapercibido en el Presupuesto 2021 presentado por el gobierno de Guillermo Montenegro, donde se contemplan partidas por $283 millones para invertir en vivienda e infraestructura urbana, con el desafío de cumplir con las proyecciones. Es que la Secretaría de Obras arrastra un fuerte déficit en cuanto a la ejecución presupuestaria, tanto en el gobierno de Carlos Arroyo como en el primer año de la nueva gestión. Según los datos oficiales, en los primeros tres trimestres del 2020 se gastaron apenas el 25% de los fondos disponibles.

La principal intervención pautada para el próximo año es la de la atrasada urbanización de Villa Evita. La partida de $250 millones se da en el marco de un Proyecto Integral de Hábitat y Vivienda financiado con transferencias de capital de la administración central nacional y en el marco de un convenio de la Municipalidad de General Pueyrredon con el Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda de la Nación, con financiación del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (Birf).

La inversión contempla un plan de unas 40 viviendas en proceso de gestión administrativa. “Toda la documentación y el pliego está a la espera de concretar la gestión con Nación para llevar adelante la obra”, contó Jorge González, el secretario de Obras que ayer expuso ante el Concejo Deliberante.



González dio detalles ante los concejales

 

Por otro lado, González informó que se destinarán $16 millones para la compra de terrenos. “La gran mayoría de los programas de vivienda nacionales requieren que el Municipio tenga tierras disponibles y este Municipio no las tiene”, explicó. El funcionario también reconoció que para este año ya estaba prevista una partida de $7 millones para esa finalidad, pero al ser reasignada no pudo ser ejecutada.

Entre el resto de las partidas previstas se destaca la provisión de Infraestructura para la consolidación de programas de emergencia habitacionales, por $10 millones, una política impulsada para asistir a personas de escaso recursos y en situación de vulnerabilidad.

Además, se contemplan otros $6 millones del Programa Federal de Integración Socio Comunitaria, en el marco de la construcción de 56 viviendas, y a raíz de una iniciativa de 2008 de la Secretaría de Obras Públicas del Ministerio de Planificación Federal, luego absorbida por el Ministerio del Interior de Nación, con intervención del Instituto de la Vivienda de la Provincia.

Finalmente, habrá una partida de $1,4 millones destinada especialmente para obras de infraestructura básica en Barrio El Martillo, una obras ya pautada para 2020 pero que no se llevó adelante.

Cada una de las intervenciones requerirá su oportuna licitación pública, a cargo de la Municipalidad. Allí se abrirá un juego de intereses que será otro de los capítulos claves.