El radicalismo llegó a estas PASO con las expectativas más altas que se recuerden desde la frustrada experiencia de la Alianza. La derrota de Juntos por el Cambio en las elecciones nacionales y provinciales, con el correspondiente debilitamiento del Pro, sumado a una internas partidarias que lo reposicionaron en el mapa político bonaerense y la salida de María Eugenia Vidal del tablero provincial, le allanaron el camino para construir una candidatura con un outsider de la política que promete una renovación. Sin embargo, los números que se barajan en todos los campamentos indican como escenario más probable una derrota en las internas de Juntos, con el triunfo de Diego Santilli. Con el mapa provincial complejo de revertir, las aspiraciones Maxi Abad se centran en la Quinta Sección, el lugar que buscará retener –allí ganó en 2019 al tope de la boleta de Juntos por el Cambio- en la región en la que la UCR comanda en 13 de las 15 intendencias que detenta la alianza opositora. Un triunfo en su terruño le dotará de un capital político nada despreciable, frente a un Pro que gobierna el principal distrito, General Pueyrredon, que congrega el 48% del padrón. La campaña radical en la Quinta trajo a su vez algunas miradas críticas puertas adentro sobre el rol cumplido por su candidato a senador Ariel Bordaisco. La escasa presencia en los pueblos de los 27 distritos que la componen buscó ser remediada en los últimos días, mientras que su rival interno, Alejandro Rabinvocih, ya pateaba desde semanas atrás la amplia geografía de la Quinta. Muchos correligionarios destacan, en cambio, el importante conocimiento público de la cuarta candidata de la lista, Vilma Baragiola, quien acompañó al presidente del HCD en sus excursiones por la sección. La situación de la UCR en la campaña en General Pueyrredon también despierta algunas alertas. La referencia de la lista unitaria de Juntos se depositó principalmente en el Pro, con el liderazgo indiscutido del intendente Guillermo Montenegro, quien se puso la campaña en sus hombros. Si bien el radicalismo cuenta con serias chances de obtener tres concejales que le permitan continuar con un bloque de tres ediles, estratégicamente la campaña –al momento al menos- sienta interrogantes a futuro, al no haber podido visibilizar su propia impronta ni a sus candidatos locales Daniel Nuñéz, Marina Sánchez Herrero y Gustavo Pujato. |