Laura Blackham Y John Goodhand se fueron de vacaciones y para mayor tranquilidad, dejaron su casa al cuidado de una familia de confianza. Sin embargo, al regresar, se encontraron con un escenario desesperante, ya que no pudieron ni siquiera ingresar, porque sus propios amigos les habían usurpado la vivienda y se negaron a devolver las llaves. |