El intendente Guillermo Montenegro y sus pares del Pro tendrán un nuevo plenario la próxima semana, posiblemente en CABA, para debatir sobre el rumbo del partido amarillo. Será el cuarto encuentro, luego de lo que fueron las reuniones en Mar del Plata, Morón y La Plata. Los jefes comunales se verán las caras tras la irrupción del expresidente Mauricio Macri en la escena pública, quien pidió-con el respaldo de María Eugenia Vidal y los halcones- endurecer la oposición al gobierno de Alberto Fernández. Y, como paso colateral, "despegarse de lo que vote el radicalismo". Se trata de un golpe de timón que Montenegro deberá analizar con cautela, habida cuenta de la cercanía que mostró con el ala “moderada” de Horacio Rodríguez Larreta, más allá del fuerte cruce entre el municipio y las altas esferas del gobierno porteño que reflejó hoy La Tecla.
En el plano provincial, la ofensiva para “no votar ninguna iniciativa que nos deje pegados con aumentos de impuestos o creación de nuevas obligaciones” -según se expresó- generó una crisis en el seno del espacio amarillo, que aún genera dudas respecto de su resolución. Por lo que el nuevo cónclave buscará clarificar entre los alcaldes el rumbo a seguir frente a esta situación.
Además, el clima de tensión interna escaló tras el portazo dado por el jefe comunal de Lanús, Néstor Grindetti, a seguir integrando la Mesa Provincial de Juntos, con lo que los alcaldes amarillos pierden un interlocutor con el gobierno de Axel Kicillof. Lo mismo ocurre con el Ejecutivo y el Legislativo bonaerense, que tenían en el referente de “Hacemos Juntos” un canal abierto con la oposición.
Es que la postura inflexible de Macri, a la que se sumaron algunos legisladores del espacio, hicieron caer el acuerdo que, durante meses, estuvo tejiendo Grindetti con el jefe de Gabinete, Martín Insaurralde, para tratar el proyecto de reforma del régimen de jubilaciones de los trabajadores del Banco Provincia.
Las rencillas internas en el PRO bonaerense no dieron la posibilidad de aprobar dicha iniciativa, sino otras que consensuaron oficialismo y oposición.
Sin brindar mayores detalles –“para no ahondar el clima caliente”, señalaron desde su entorno-el mandamás del Conurbano declinó seguir representando a los alcaldes amarillos en la mesa de las decisiones provincial, sin que hasta el momento se conozca quién lo reemplazará.
“No está claro si se buscará un reemplazante de Néstor o si habrá un replanteo general de la representación de todos los sectores”, aseguraron desde la conducción de la alianza opositora. Grindetti es uno de los “candidateables” para ocupar el sillón de La Plata, al igual que otros que ya levantaron la mano, como Diego Santilli o Cristian Ritondo.
En las últimas horas sonó fuerte el nombre del senador Christian Gribaudo, hombre del riñón de Mauricio Macri y Daniel Angelici, como nuevo integrante del grupo, que integran los radicales Maximiliano Abad y Érica Revilla (Presidente y vice del Comité Provincia); el ministro de Gobierno porteño e intendente de Vicente López (de licencia), Jorge Macri y el jefe comunal de San Nicolás, Manuel Passaglia, en representación del PRO; el peronista en Cambiemos y actual senador provincial, Joaquín De la Torre; y dos dirigentes de la Coalición Cívica: el senador bonaerense Andrés De Leo y la diputada provincial Maricel Etchecoin. |
