Varadero de la Base Naval: 39 meses, 0 barcos desguazados

Se cumplen 39 meses desde que el Consorcio Portuario Regional firmó un convenio con la Base Naval para el desguace de buques en el varadero. A tan solo 30 días de cumplirse el fin del acuerdo, siguen sin registrarse desguaces.

Los barcos en desuso se han vuelto una postal habitual para quienes recorren el puerto marplatense. Ya sea en la zona de la Banquina como en la de los muelles, hay decenas de embarcaciones estacionadas sin funcionamiento.

Pero no se trata solo de un problema visual: el espacio ocupado por las naves defectuosas congestiona el tráfico portuario e implica un costo de millones de pesos para la flota operativa. Además, implica un riesgo en materia ambiental, ya que se trata de chatarra que se pudre en el mar. Un relevamiento del año 2020 indicaba que había al menos 52 buques en condición de inactivos en el puerto local.

Es por eso que durante la gestión de Martín Merlini al frente del Consorcio Portuario Regional, se firmó un convenio entre la Provincia de Buenos Aires y Defensa para hacer uso del varadero de la Base Naval con el fin de desguace. El plan preveía su uso durante 40 meses. Sobre el varadero se invirtieron alrededor de 10 millones de pesos en la puesta en valor del varadero que permitiría liberar 120 metros del muelle 2.

A 39 del acuerdo no se utilizó ni una vez. El cambio de mando al ravertista Gabriel Felizia, durante 2020, no supuso un impulso para el plan. Los únicos desguaces registrados fueron realizados en los astilleros SPI y TPA, mientras que otros barcos fueron llevados a los puertos del sur para su puesta a punto.

Otras iniciativas que permitirían alivianar el tráfico portuario, como la construcción del "Espigón 9" también se mantienen ausente de novedades.

Incentivos de bajo impacto

En 2021, mediante la resolución 343-21, el directorio del Consorcio Portuario Regional de Mar del Plata,  resolvió aplicar un régimen de promoción permanente en materia de cánones de ocupación de espacios marítimos portuarios, para aquellos propietarios de buques en condición de inactivos. Esto significa que serán eximidos del pago por “uso del puerto”.

El documento indicaba, además, que se trata de una responsabilidad de los armadores y que las posibilidades de acción de la autoridad portuaria se encuentran limitadas. El varadero, a poco de cumplirse los plazos de uso, continúa brillando por la ausencia de los trabajos para los que fue solicitado.