El Régimen de Incentivos a la Construcción cumple tres años. Sancionado en el marco de la Ordenanza 25.114, el 2 de mayo de 2021, el programa logró nuevas prórrogas a partir del beneplácito del empresariado del sector y también de la política. El Ejecutivo comenzó a poner al rubro dentro de la cartilla pública de declaraciones a partir del comienzo de la segunda gestión de Montenegro. El propio intendente infló pecho en las conferencias de prensa de los viernes dónde reiteró un dato: Mar del Plata fue durante el 2023 la segunda ciudad con más metros construidos.
No obstante, el Régimen trajo consigo varios claroscuros. En los papeles, flexibilizó las premisas del C.O.T. y motivó excepciones y pedido de indicadores, más atados a voluntades individuales que a una visión a largo plazo de ciudad. El Concejo, catalizador de dicho proceso, nunca llegó a sancionar un sistema de compensaciones, previstos en la Ordenanza 25.115, votada el mismo día que el Régimen y pensada como un contrapeso.
El origen
El proyecto fue pensado en el marco de la pandemia como un estímulo para el sector de la construcción en busca de generar puestos de trabajo. Entre sus ejes centrales apuntaba a establecer un régimen promocional a aquellos proyectos privados que emergieron durante el período comprendido entre abril de 2019 y abril de 2020 para “incentivar en capacidad edilicia y altura a los emprendimientos ya presentados, cuya inversión se vio alterada por el contexto socioeconómico generado en nuestro país con motivo de la pandemia COVID-19”.
También se proponía la continuidad de los incrementos promocionales, de carácter transitorio, para los distritos de Residenciales y Centrales de alta y media densidad (R1,R2, R2e, R3, R4, R4e, C1, C1a, C1e, C2, C3, E1, E2) contemplados en el Código de Ordenamiento Territorial (COT). Las principales arterias abarcadas aquí se extienden por las calles lindantes a la zona comercial de Güemes, las avenidas Colón e Independencia, la costa y la zona que circunda la Estación Ferroautomotora, entre otras regiones.
Según el Ejecutivo municipal, en el 2021 la superficie de obra nueva presentada por privados fue de 282.677,02 metros cuadrados, un 88% más que en 2020. Asimismo, el Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción, en su Encuesta de Indicadores Laborales por Trimestre y rama correspondiente, registró que hubo un crecimiento de más de 5 puntos porcentuales en la actividad entre 2020 y 2021.
Las excepciones icónicas y la firma indeleble del secretario
Tanto Legislativo como Ejecutivo jugaron un rol clave durante los tres años como promotores del Régimen de Incentivos y por ende, también, de sus puntos más vidriosos. En este período se sacaron adelante varios proyectos "ícónicos" que suponían la autorización de excepciones al Código de Ordenamiento Territorial (C.O.T.): aumentos del FOT y el FOS, mayor cantidad de metros, pedido de indicadores y cambios en el uso de suelo, entre otros.
Algunos de estos proyectos se trataron en paquete, como ocurrió con el Distrito de Arte y Diseño (DAD), también conocido como el "Puerto Madero marplatense"; las torres en torno a edificios patrimoniales como "Villa Titito" o el "Chateau Frontenac" y el caso de las lujosas estructuras en el predio del ex-Hurlingham Hotel.
A esto se sumó el polémico caso de "La Reserva", dónde a pedido de los empresarios, la Secretaría de Obras que conduce Jorge "Guasa" Gonzalez. El radical, que forma parte del riñón del ex-intendente Katz, aparece una y otra vez como impulsor o recomendador.
La reforma que nunca llegó y el sistema de la prórroga infinita
La última actualización del Código de Ordenamiento Territorial fue hace más de 22 años, a través de la ordenanza 13.231. Desde aquel entonces hasta la fecha, la política local ha hecho de las excepciones a la norma una práctica recurrente, por lo que emerge el desafío de armonizar el desarrollo sustentable y planificado de la ciudad con el otorgamiento de estímulos a un sector crucial de la economía local.
El sistema de compensaciones fue planteada como objetivo en la Ordenanza 25.115, sancionada a la par de las 25.114. No obstante, vencido el plazo de dos años establecido para rubricar un escrito, la norma nunca llegó. El oficialismo requirió de una prórroga de 60 días. Cuándo por fin llegó una propuesta, la bancada que responde el Ejecutivo solicitó otra extensión del plazo por 180 días. De este modo la política abrió el paraguas hasta agosto.
La interrogante queda abierta: ¿fue el Régimen de Incentivos un ariete de la política y el empresariado para birlar lo estipulado por el ajado C.O.T.?
|
