ELECCIONES NACIONALES
La Tecla Mar del Plata
Redacción
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Serga.NET
19 de octubre de 2025
Rosca sin micrófonos: el Concejo negocia comisiones antes de renovar bancas
El recambio legislativo llega con negociación feroz: nadie quiere perder presidencias y todos buscan lugar en las 13 comisiones del HCD.
El Concejo Deliberante de General Pueyrredon todavía no renovó bancas, pero ya empezó la verdadera elección: la interna por el reparto del poder puertas adentro. El 10 de diciembre se renueva la mitad del recinto —12 de los 24 escaños— y, como en cada recambio, lo que está en juego no es solo quién entra o quién se va, sino quién se sienta en cada sillón de mando dentro de las comisiones.
Con los nuevos concejales todavía sin jurar, el HCD está en ebullición hacia adentro. Se negocia a puertas cerradas la conducción de las comisiones clave, los lugares que ocupará cada bloque y, sobre todo, qué espacios conservarán poder. Nadie quiere perder una presidencia y todos quieren sentarse donde se discute (y se define) el presupuesto, las obras, las habilitaciones o los proyectos inmobiliarios.
Las 13 comisiones que se disputan son:
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Legislación, Interpretación y Reglamento
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Obras y Planeamiento
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Educación, Cultura, Ciencia e Investigación
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Movilidad Urbana
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Hacienda, Presupuesto y Cuentas
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Salud Comunitaria y Desarrollo Humano
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Turismo
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Deportes y Recreación
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Ambiente, Desarrollo Sostenible y Servicios Sanitarios
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Derechos Humanos, Igualdad de Oportunidades y Discapacidad
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Industria, Comercio, Pesca, Innovación y Trabajo
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Seguridad Pública y Protección de la Comunidad
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Políticas de Género, Mujer y Diversidad
La rosca no es solo por los que se van y deberán entregar sus presidencias, sino también entre quienes continúan y no están dispuestos a resignar espacios. Hay bloques que, aun con pocos concejales, buscan encajar como “llave”, a cambio de votos o gobernabilidad.
El Concejo vive días de pasillos, cafés cerrados y teléfonos ardiendo. Nadie habla en voz alta, pero todos se mueven. El 10 de diciembre llegará, pero lo que importa no es solo quién jura, sino quién manda en cada botón de la máquina legislativa.