La Tecla Mar del Plata
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La aprobación del dictamen que propone bajar la edad de imputabilidad a 14 años representa un avance significativo en una de las banderas históricas del PRO, tanto a nivel nacional como en General Pueyrredon. El concejal Agustín Neme, presidente del bloque oficialista en el Concejo Deliberante, no tardó en expresar su satisfacción en redes sociales, donde destacó el trabajo articulado entre figuras clave del partido como Diego Santilli, Cristian Ritondo y el intendente Guillermo Montenegro.
“Qué buena noticia”, escribió Neme en X, dejando en claro que el dictamen no es un hecho aislado, sino el resultado de una línea política sostenida en el tiempo. Desde hace años, el PRO impulsa la consigna de que para combatir el delito hay que adecuar el sistema penal a la realidad actual. Y este paso en el Congreso marca, para Neme y su espacio, el inicio de esa transformación.
Que buena noticia. Mucho trabajo desde el @proargentina para lograr sentido común.
— Agustin Neme (@agustin_neme) May 6, 2025
Acá hay mucho trabajo desde hace tiempo con @diegosantilli@gmontenegro_ok @cristianritondo y muchos más. Este es el camino. https://t.co/pyL9aeshvk
En Mar del Plata, el reclamo por la baja de imputabilidad ha sido reiterado por el oficialismo como parte de una respuesta concreta ante una creciente demanda ciudadana por mayor seguridad. Neme ha sido uno de los voceros más consistentes en vincular la problemática del delito con la necesidad de revisar los límites de la responsabilidad penal juvenil. Para él, el “sentido común” que menciona en sus declaraciones no es sólo una frase: es el eje de una política de seguridad que el PRO quiere instalar como dominante en el debate público.
Con este dictamen, el PRO no solo obtiene un avance legislativo. Logra también afianzar una victoria simbólica: que su agenda en materia de seguridad –una de sus principales banderas en todo el país– avance en el Congreso y gane legitimidad política. La reacción de Neme no fue una más: funcionó como la muestra de que el oficialismo local siente el dictamen como propio, como una conquista largamente esperada.