La Tecla Mar del Plata
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Este domingo 18 de mayo, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires celebrará elecciones legislativas para renovar 30 de las 60 bancas de su Legislatura. Aunque se trata de un proceso porteño, la política marplatense observa con atención los resultados, anticipando posibles efectos en la estrategia electoral de la provincia de Buenos Aires, donde las elecciones también serán desdobladas de las nacionales, en una jugada inédita en el distrito.
El PRO arriesga 15 bancas en esta contienda; la alianza Es Ahora Buenos Aires, 8; y La Libertad Avanza, 6. Entre los principales nombres que compiten se encuentran Manuel Adorni, Leandro Santoro, Silvia Lospennato, Ramiro Marra y Horacio Rodríguez Larreta. Más allá de los resultados individuales, el interés local radica en cómo se reconfigurarán las fuerzas y qué liderazgos emergen con más peso para ordenar —o desordenar— el escenario bonaerense.
Las tensiones entre Mauricio Macri y Javier Milei derivaron en una ruptura formal entre el PRO y La Libertad Avanza en CABA. Sin embargo, en territorio bonaerense todo indica que ambos espacios buscarán confluir. Por eso, en Mar del Plata se sigue de cerca la performance de Adorni y Lospennato: sus ubicaciones en las listas y su capital electoral podrían marcar la pauta de las negociaciones provinciales. Para sectores del PRO marplatense, integrarse a una alianza con LLA es una posibilidad concreta, siempre que el reparto de lugares en las listas resulte favorable.
En la vereda opuesta, el peronismo local tampoco está ajeno a las repercusiones. Leandro Santoro encabeza una lista que cuenta con el respaldo del kirchnerismo, La Cámpora, el massismo y buena parte del PJ porteño. En paralelo, figuras como Juan Manuel Abal Medina —apoyado por el Movimiento Evita— y Alejandro Kim —postulado por el partido Principios y Valores de Guillermo Moreno— presentan alternativas por fuera del sello tradicional. Esta fragmentación genera incertidumbre y podría replicarse en la provincia si no se logra unificar las diversas vertientes del peronismo bonaerense, especialmente ante las tensiones entre Axel Kicillof y sectores duros del kirchnerismo.
La UCR también muestra dos caminos: en CABA, el sector de Martín Lousteau impulsa a Lucille “Lula” Levy por Evolución. En Mar del Plata, sin embargo, el radicalismo se encolumnó detrás de Maximiliano Abad, que observa con atención cómo se acomodan los amarillos y los violetas para negociar espacios desde una posición más pragmática que ideológica.
Incluso la Coalición Cívica decidió jugar sola en CABA con Paula Oliveto a la cabeza de la lista “Es con Vos”, pero en Mar del Plata prevalece el “modelo coalición”. Los dirigentes locales no descartan sumarse a la alianza que surja entre PRO y LLA, siempre que encuentren una puerta de entrada competitiva.
Los comicios de este domingo en CABA son un gran test electoral del año, y sus resultados funcionarán como un barómetro para todas las fuerzas. Con una mirada puesta en las legislativas provinciales de septiembre, en Mar del Plata la política espera señales. Lo que ocurra en la capital nacional no quedará limitado al mapa porteño: podría ser el primer paso hacia una reconfiguración general de alianzas, listas y liderazgos también en el escenario bonaerense.