La Tecla Mar del Plata
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El Concejo Deliberante de General Pueyrredon dio curso al expediente del Ejecutivo local con proyecto de ordenanza que propone modificar la zonificación de una manzana ubicada entre las calles Dr. Victoriano E. Montes, Balcarce, Juncal y Av. Libertad, en la ciudad de Mar del Plata. La iniciativa fue aprobada para su giro a la Comisión de Legislación, paso previo a una posible sanción definitiva.
La propuesta busca desafectar al predio del distrito Equipamiento uno (E1) —zona destinada a servicios compatibles con viviendas— y afectarlo al distrito Industria Equipamiento (Ie), lo que habilita usos industriales de mayor complejidad. Según el Código de Ordenamiento Territorial, el nuevo distrito permite la instalación de industrias de primera, segunda y tercera categoría, mientras que el actual solo admite las dos primeras.
Desde el Departamento de Promoción de Industrias, autor de la iniciativa, se argumenta que este cambio daría continuidad a la trama industrial existente en las manzanas lindantes, y abriría paso a la radicación de nuevas empresas, ampliación de las ya existentes y, con ello, generación de empleo y dinamización económica local.
El debate en el recinto dejó en evidencia que el proyecto toca fibras sensibles. La concejala Virginia Sívori (Unión por la Patria), que se abstuvo en la votación, advirtió que en la manzana conviven 16 parcelas con viviendas unifamiliares y multifamiliares, y planteó que la medida podría haber sido más específica: "La solución podría haber sido excepcional para una o dos parcelas, sin cambiar la categoría de toda la manzana. Esto podría abrir la puerta a industrias incompatibles con la vida residencial", alertó.
En la misma línea, la concejala Marianela Romero (UCR) también se abstuvo, y puso el foco en la descoordinación entre el decreto provincial 531/19 y la normativa municipal para la categorización de industrias. Según explicó, muchas veces se considera que ciertas actividades son compatibles con viviendas desde el punto de vista local, pero la provincia las clasifica en categorías que implican restricciones más severas. Romero coincidió con el espíritu de la propuesta pero pidió más tiempo para estudiar el encuadre legal.
Desde el bloque oficialista del PRO, la concejala Florencia Ranellucci respaldó el proyecto, destacando que responde a “una necesidad del sector” y que el expediente aún tiene una instancia más para posibles ajustes: “Creemos que viene a resolver una demanda concreta, y agradecemos el acompañamiento de los otros bloques”, expresó.
El expediente será ahora analizado en la Comisión de Legislación, donde podría recibir modificaciones antes de su aprobación final. Sin embargo el debate deja en evidencia una tensión urbana persistente: la frontera difusa entre desarrollo productivo y calidad de vida residencial, que se vuelve especialmente crítica en zonas de uso mixto como esta, donde la planificación exige equilibrio, sensibilidad y diálogo con el territorio.