13 de junio de 2025
A PASO FIRME
Los libertarios denuncian penalmente, con el apoyo del PRO
Tras el ataque al local de La Libertad Avanza en Mitre y Belgrano, referentes del espacio anunciaron una denuncia penal contra los responsables y reforzaron su discurso de “fin de la impunidad”. “No nos van a intimidar”, señalaron en medio de un clima político en tensión.

El conflicto político tras el fallo de la Corte Suprema de Justicia contra Cristina Fernández de Kirchner continúa generando repercusiones en Mar del Plata. Luego de que el local de La Libertad Avanza (LLA), ubicado en la esquina de Mitre y Belgrano, apareciera vandalizado con pintadas de apoyo a la ex presidenta, referentes del espacio libertario salieron al cruce con una denuncia penal. La presentación fue realizada por la concejal Cecilia Martínez, quien fue respaldada en redes por el vicepresidente del partido a nivel provincial, Alejandro Carrancio y el edil Emiliano Recalt.
“En la Argentina de Javier Milei, el que las hace, las paga”, sostuvo Martínez en un video que difundió desde sus redes sociales, donde remarcó que los hechos quedaron registrados por las cámaras de seguridad del local. “Las personas están identificadas. Ahora esperamos que actúe la justicia”, expresó con tono firme.
A su vez, Carrancio replicó el video y aseguró que “no hay impunidad para los violentos”.
Mientras que Recalt completó: “Se terminó la impunidad”.
El episodio forma parte de una seguidilla de manifestaciones en todo el país en repudio al fallo contra Cristina Fernández. Sin embargo, desde el oficialismo libertario buscan encuadrar el hecho como parte de una escalada de violencia política alentada por el kirchnerismo. La narrativa de “orden y castigo” no es nueva, pero se intensifica en la campaña: la idea de que en la “nueva Argentina” no hay lugar para la impunidad ni para los símbolos de la vieja política.
En este contexto, el concejal del PRO, Agustín Neme, compartió: "Nos sumamos al pedido para que se identifique a los responsables y también saber a quienes responden.
Esto se tiene que terminar. Basta de violencia".
En un escenario electoral cada vez más polarizado, la denuncia también cumple una función discursiva: marca diferencias con el pasado, refuerza la identidad libertaria y busca sostener el relato de autoridad moral frente a una oposición a la que se señala como violenta, corrupta o cómplice del deterioro institucional. La Justicia, ahora, deberá decidir si acompaña esa construcción o si el hecho queda como un gesto más en la contienda política que atraviesa la ciudad.