El gobierno de Guillermo Montenegro oficializó, mediante su publicación en el Boletín Oficial, las designaciones de los nuevos Jueces de Faltas que habían recibido un aval exprés del Concejo Deliberante, cerrando así una de las deudas políticas más antiguas de la gestión. Los nombramientos ponen fin a casi ocho años de acefalía en el fuero contravencional, un período marcado por la subrogancia y la ralentización en el procesamiento de expedientes.
Los decretos, todos fechados el 7 de noviembre de 2025 y firmados por el intendente Guillermo Montenegro y el Secretario Legal, Técnico y de Hacienda, Mauro Martinelli, designan a Franklin Ezequiel Llan de Rosos al frente del Juzgado N° 1, a María Paula Hernández en el Juzgado N° 2, y a Leandro Augusto Gabás en el Juzgado N° 5.
Estas designaciones completan una estructura judicial que funcionaba de manera parcial desde 2017. El decreto de Hernández llena la vacante generada por la renuncia de Ana María Castelao para acogerse a la jubilación. Por su parte, Llan de Rosos ocupa el cargo dejado por la reciente jubilación de José Luis Oteiza. Durante años, ni la gestión de Carlos Arroyo ni el primer mandato de Montenegro lograron reunir el consenso político necesario en el Concejo Deliberante para avanzar con los nombramientos.
La parálisis no solo tuvo un impacto institucional, sino también económico, afectando la capacidad de procesamiento de causas y la recaudación por multas. Tras la reelección, el oficialismo logró destrabar la situación y obtuvo el acuerdo del Concejo Deliberante, en una sesión que, si bien fue unánime, no estuvo exenta de críticas opositoras por la demora y la celeridad del trámite final.
En una movida complementaria, el Ejecutivo designó "Ad Honorem" al Dr. José Luis Oteiza, el juez recién jubilado del Juzgado N° 1. Oteiza se desempeñará como Asesor en el mismo tribunal que dejó, con el objetivo de aportar su "extensa trayectoria" y brindar asistencia técnica y capacitación. Con la publicación de estos decretos, Montenegro se anota una victoria de gestión, exhibiendo orden administrativo y gobernabilidad antes de finalizar su mandato.