La Tecla Mar del Plata
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El futuro del Estadio José María Minella, el Polideportivo Islas Malvinas y los espacios comunes del Parque Municipal de los Deportes “Teodoro Bronzini” sumó un nuevo capítulo este miércoles 25 de junio, cuando a las 13:00 se llevó a cabo la apertura del segundo sobre de la Licitación Pública Nacional e Internacional N° 03/25. La instancia reveló la propuesta económica presentada por Minella Stadium S.A., el único oferente del proceso, que ofertó el monto mínimo establecido en el pliego: 120 millones de pesos anuales.
La propuesta contempla una concesión por 30 años, con posibilidad de prórroga por una década más, y compromete la gestión integral de los principales espacios deportivos y culturales de la ciudad. Además del canon ofrecido, la empresa promete una inversión inicial de 29.560 millones de pesos en obras, más 17.725 millones en obras adicionales a futuro, un aporte irrevocable de 40 millones de dólares, y la firma de un convenio con AFA para fortalecer la programación deportiva.
El esquema también incluye la garantía de entre 80 y 95 eventos anuales: entre 30 y 35 en el estadio, además de la presencia de los equipos marplatenses de fútbol, y entre 50 y 60 en el Polideportivo, con los tres equipos locales de básquet.
La apertura se realizó en la Dirección General de Contrataciones y contó con la presencia de Rafael Trevisán, presidente de la sociedad, y representante del estudio jurídico Clariá & Trevisán. El consorcio lo completan el fondo brasileño Revee y la firma Proenteer.
No obstante, la licitación no está exenta de polémica. Minella Stadium S.A. fue constituida en diciembre de 2024, tiene sede en CABA y está integrada por Trevisán y Santiago Casares. Su creación ad hoc, la falta de antecedentes empresariales y la ausencia de competencia real generaron fuertes cuestionamientos desde sectores de la oposición y del Concejo Deliberante.
Con la oferta económica ya sobre la mesa, el próximo paso será la recomendación de adjudicación por parte del Ejecutivo, que luego deberá ser tratada por el Concejo Deliberante. Recién con ese aval se podrá firmar el contrato definitivo. Sin embargo, también existe la posibilidad de que el proceso sea declarado desierto y se convoque a una nueva licitación.
Por ahora, el destino de uno de los principales polos deportivos de Mar del Plata queda en suspenso, mientras se multiplican las voces a favor y en contra de este ambicioso y cuestionado proyecto de concesión.