La Tecla Mar del Plata
Todos los derechos reservados
Luego de varios meses de parálisis y con más de un centenar de barcos amarrados, el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) logró un entendimiento con el sector empresario que permitirá reactivar la pesca de langostino. El acuerdo incluye recortes salariales y compromisos de revisión para la próxima temporada.
Tras largas negociaciones y una temporada casi perdida, el SOMU alcanzó un acuerdo con las cámaras empresarias que destraba el conflicto que tenía en jaque a la industria pesquera. El entendimiento se firmará en las próximas horas y habilitará el regreso de los buques congeladores a la actividad, tras varios meses de inactividad que afectaron a puertos de todo el país.
La disputa surgió cuando el sector empresario reclamó modificar el Convenio Colectivo de Trabajo, advirtiendo que los costos hacían inviable sacar los barcos. Argumentaron, además, que el precio internacional del langostino cayó entre un 2,8% y un 5,6% interanual, lo que erosionó la rentabilidad. En respuesta, el gremio rechazó cualquier intento de rebaja salarial que implicara desconocer derechos adquiridos.
Finalmente, el pacto incluyó la implementación del esquema de tripulación 70/30 —que reduce la carga impositiva para los armadores— y un descuento del 9% sobre el recibo total, lo que se traduce en una baja real del 12% en los valores productivos. A cambio, las cámaras aceptaron mantener el convenio vigente y se comprometieron a revisar las condiciones de cara a la próxima temporada.
Durante el conflicto, 111 barcos permanecieron inactivos, con alrededor de 600 trabajadores sin tareas en Mar del Plata y miles más afectados en Puerto Madryn y Puerto Deseado. El parate dejó huellas en los desembarques: hasta fines de julio apenas se descargaron 62.000 toneladas de langostino en todo el país, frente a las 125.500 del mismo período del año pasado.
El acuerdo con SOMU se suma a los ya alcanzados con otros gremios del sector, como SICONARA y Capitanes, y marca el inicio de una reactivación que podría recuperar parte de la temporada. En los próximos días, las tripulaciones serán convocadas para retomar los viajes y reanimar la actividad en los puertos.
Con esta negociación, el gremio marítimo logra sostener el convenio y frenar un recorte más profundo, mientras las empresas obtienen alivio en los costos para volver a operar. El equilibrio es frágil, pero por ahora, la flota vuelve al mar.