La discusión sobre el Presupuesto 2026 ya empezó a mover las piezas en el tablero político de General Pueyrredon. Con el plazo legal que vence el 31 de octubre, la incógnita que sobrevuela los pasillos del Palacio municipal es quién tendrá la lapicera en la mano a la hora de enviar el proyecto al Concejo: ¿será el propio intendente Guillermo Montenegro, que estará en funciones hasta el 10 de diciembre, o su sucesor interino Agustín Neme?
El contexto agrega condimentos. A nivel nacional, Javier Milei ya elevó su proyección de gastos y recursos, mientras que en la Provincia Axel Kicillof sigue sin mostrar su hoja de ruta. En el plano local, el oficialismo enfrenta el desafío de resolver si pide otra prórroga —como en años anteriores— o si acelera la jugada para tratar de aprobar el presupuesto antes del recambio legislativo, cuando perderá la mayoría en el recinto.
La discusión presupuestaria aparece así como la última gran pulseada de Montenegro con control del Concejo. En paralelo, desde el Ejecutivo aseguran que ya se trabaja en el borrador, aunque sin confirmar si la presentación llevará la firma del intendente saliente, de su reemplazante temporario o si será una movida consensuada entre ambos.
La definición promete tensión política y marcará el tono de la relación entre oficialismo y oposición en la recta final del año